El nuevo presidente de Indra desde enero, Ángel Escribano, ha cerrado la puerta a una venta de Minsait, la filial tecnológica de Indra. El ejecutivo ha sido tajante durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados de este jueves sobre la potencial desinversión, aunque sí ha dejado la puerta abierta a la venta de aquellas partes de Minsait que podrían no ser estratégicas. En septiembre esta empresa ya confirmó que abría de forma oficial un proceso de venta de Minsait Payments, que este mismo jueves ha sido rebautizado como Nuek.
Escribano ha sido mucho más tajante respecto de la imposibilidad de vender Minsait de lo que fue el consejero delegado de Indra, José Vicente de los Mozos, a principios de febrero, en su comparecencia tras la presentación de resultados. En ese momento, se dijo que la venta sólo se produciría si se daba un precio adecuado y que no había prisa por hacer la desinversión. “Cuando vendamos Minsait, no será para repartir un dividendo extraordinario a nuestros accionistas, sino para invertir en esta empresa”, respondió entonces De los Mozos en una conferencia de analistas.
Varios fondos como Apax o Cinven han sondeado la posibilidad de esta compra en los últimos meses, aunque dicho potencial interés no se ha concretado en nada.
Escribano asegura ahora que su obsesión con Minsait es dar un buen servicio y poder así distanciarse de sus competidores. Según señalan se trata de una muy buena compañía con muy buenos profesionales. No obstante, cree que hay que dar servicios de forma diferente a como se hacía en 2015, de ahí que busque darle mucho más valor añadido, pero ha recalcado que no tiene intención de que esta firma sea vendida.
Respecto de la compañía Santa Bárbara, Escribano no ha entrado a valorar por qué se vendió, algo que han afeado varios diputados de la comisión. Pero ha asegurado que es un gran anhelo de nuestro ministerio, de nuestras fuerzas armadas, de nuestro ejército de tierra poder tener una fábrica nacional. “No voy a hacer ninguna crítica a General Dinamics (firma estadaounidense actual dueña de Santa Bárbara), salvo que, como se dice en prensa, es cierto y cristalino que no ha habido inversión, no ha crecido y ha destruido el tejido industrial de lo que en su día fue la gran empresa Santa Bárbara, y por ese motivo desde Indra se le lanzó una opción para comprar las capacidades y pagar por el uso de ellas”.
“Es una compra muy pero que muy exitosa para el vendedor, porque lo que vamos a hacer es traer otras tecnologías y desarrollar las nuestras propias. Este país se merece tener unas tecnologías que son nuestras”. “Algunas de estas tecnologías las hemos pagados los españoles con nuestro dinero y con nuestros impuestos a lo largo de los últimos 25 años”, ha aseverado.
“Esa tecnología es propiedad de los españoles y lo que tiene todo el sentido es que eso vuelva a estar en nuestras manos”. “No voy a entrar en las razones de por qué se vendió, pero volver a nacionalizar esa empresa o que la tenga Indra tendría todo el sentido” ha señalado Escribano que ha añadido que “también podríamos no hacerlo, seguir esperando y lamentarnos dentro de X años”. “La idea de integracion en la cadena de valor de Santa Bárbara es total”, ha explicado el ejecutivo de Indra.
El presidente de Indra, Ángel Escribano, ha señalado que las circunstancias actuales han puesto el viene a favor para la compañía. En un contexto en el que Europa pretende rearmarse y aumentar el gasto en defensa, el nuevo presidente de la compañía ha destacado su intención de convertir a Indra en un campeón a nivel europeo en los sectores del espacio y la defensa. Desde el reposicionamiento de EE UU respecto del conflicto de Rusia y Ucrania, Indra, cuyo máximo accionista es el Estado a través de la SEPI, ha subido un 60% en bolsa.
Sin embargo, el primer ejecutivo de la empresa no ha querido ser complaciente con la situación de la empresa en la comisión mixta de Seguridad Nacional del Congreso de los Diputados, donde ha comparecido a petición del PP. “Hemos tenido unos resultados excelentes en 2024 pero no podemos ser conformistas. Siendo buenos estos resultados, no son los esperados en nuestro sector porque otras compañías europeas han crecido más que nosotros”, ha señala Escribano.
Con este panorama, Escribano ha desarrollado los puntos clave del plan estratégico de Indra, que busca transformarse y dar “un cambio radical” con “una estructura mucho más vertical”. Su intención es recuperar capacidades y ser un actor que lidere la cadena de valor de la industria española en los sectores de la defensa y del espacio. “Queremos coger tamaño”, ha aseverado. Este ejecutivo cree que muchas capacidades se externalizaron a países terceros pero en el panorama geopolítico actual y las experiencias como la de la pandemia demuestran que es necesario recuperar esas capacidades para ganar autonomía estratégica. “Queremos que Indra vuelva a tener una capacidad de fabricación que nunca debió perder”, señaló Escribano.
En esta lógica ha justificado la compra de Hispasat, que cuenta con una filial de defensa, Hisdesat. El objetivo de Indra, que pretende facturar 10.000 millones de euros en 2028, es volver a ser un fabricante que abarque todas las fases de producción, desde el diseño a la entrega de sus productos. “Si vemos a las grandes empresas del sector que triunfan en el mundo, como las americanas, están generando valor gracias a tener una cadena de valor completa. Hoy día, comprar y vender solo es un buen negocio, pero dura poco. El que diseña, fabrica y comercializa tiene pilares más firmes”.
tiene, se puede desarrollar una industria en España que genere bienestar y prosperidad. Indra cuenta con 36.000 trabajadores en España, según ha destacado Escribano, presentes en doce comunidades autónomas distintas
Ángel Escriban ha anticipado que “en las próximas semanas” se hará la entrega de los Vehículos de Combate de Ruedas (VCR) 8×8 Dragón, tras haberse incumplido los plazos de entrega exigidos por el Ejercito español que encargó los blindados.
El pasado mes de diciembre, el Ministerio de Defensa amagó estudió con imponer una multa por dichos retrasos. La titular de Defensa, Margarita Robles, convocó a una reunión con los consejeros delegados de los cuatro socios de Tess (Indra, General Dynamics Santa Bárbara, Escribano y SAPA) para analizar la marcha del principal programa del Ejército de Tierra, con un presupuesto de 2.500 millones.
Escribano ha explicado que la puesta a punto de estos blindados de combate es lo que ha provocado los retrasos. La sofisticación de la plataforma que llevan estos 8×8 está detrás de las demoras, según ha detallado.
Esta misma mañana, antes de la comparecencia de Escribano en el Congreso, Indra ha anunciado que su filial de medios de pago, Minsait Payments, ha pasado a denominarse Nuek. El cambio de nombre llega seis meses después de que Indra confirmara que había iniciado un proceso de venta de esta división, sin que por ahora haya concretado dicha desinversión.
“Este cambio forma parte de una estrategia de crecimiento y especialización que refuerza su autonomía, su capacidad de innovación y su posicionamiento como socio clave en la transformación del ecosistema de pagos. Enla actualidad, la compañía opera en más de 20 países de América y Europay cuenta con más 1.500 profesionales especializados en este ámbito”, ha detallado Minsait en un comunicado.