Un 7 de marzo de 2021 la sociedad civil de Jaén se puso en pie y se rebeló contra su olvido. Miles de personas protagonizaron una caravana de vehículos desde la capital hasta Despeñaperros para levantar su voz contra el abandono y la falta de respuesta institucional a las demandas históricas de esta provincia. Este viernes, justo el día en el que se cumplían cuatro años de esa multitudinaria e inédita movilización ciudadana, el Gobierno ha anunciado una inversión de 400 millones para conectar Jaén con la alta velocidad y de otros 50 millones para una estación intermodal de transportes.
“Llevamos años de espera, pero ahora estamos ante una nueva oportunidad, hay un futuro esperanzador”, señaló este viernes el alcalde de Jaén, Julio Millán (PSOE) tras oír las nuevas inversiones ferroviarias anunciadas por el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, que admitió que “esta provincia ha padecido un injustificable déficit inversor en materia de infraestructuras que ahora estamos corrigiendo”.
La rebelión ciudadana de marzo de 2021 fue considerada un punto de inflexión por parte de las plataformas y colectivos vecinales que la promovieron. En aquel momento, la gota que colmó el vaso de la paciencia de los jiennenses fue la decisión del Gobierno de la nación de llevarse a Córdoba la base logística del Ejército de Tierra (Concentración de Órganos Logísticos Centrales del Ejército, COLCE), a pesar de que las autoridades de Jaén y el mismo Parlamento andaluz ya habían aprobado su inclusión en esta provincia. La entonces vicepresidenta del Gobierno, la cordobesa Carmen Calvo, se convirtió en centro de las iras de los jiennenses, un estupor que el Gobierno de la nación intentó contrarrestar el 2 de diciembre de 2022 cuando Pedro Sánchez fue a Jaén para anunciar una potente inversión para construir aquí el Centro Tecnológico de Desarrollo y Experimentación (Cetedex) del Ministerio de Defensa.
“Este día, junto al anuncio del Cetedex, van a marcar un antes y después en esta provincia”, afirmaba un eufórico presidente de la Diputación, el socialista Francisco Reyes, convencido de que el Cetedex (que se encuentra actualmente en ejecución en su primera fase) será un “elemento tractor” para atraer inversiones a la provincia.
Pero entre la movilización de 2021 y el día de ayer ha habido otro elemento decisivo para que Jaén empiece a ver hechas realidad sus demandas históricas. El pasado 2 de enero el PSOE recuperaba la alcaldía de Jaén en una moción de censura contra el PP y que fue apoyada por los tres concejales de Jaén Merece Más (JM+), una formación política que hace cuatro años, siendo aún plataforma ciudadana, fue la principal instigadora de la rebelión ciudadana que tomó las calles y las carreteras de la ciudad. El propio alcalde socialista de Jaén agradeció la implicación de la vicepresidenta María Jesús Montero en las negociaciones que llevaron al cambio en la alcaldía jiennense.
La llegada de infraestructuras fue uno de los puntos capitales de la moción de censura, y por eso ahora JM+ no ha dudado en atribuirse la paternidad de la inversión anunciada. “El pacto de JM+ logra que Jaén se sume a la alta velocidad y cuente con una estación intermodal y mejores carreteras”, se felicitaba ayer Juanma Camacho, presidente de esta formación provincialista que nació al amparo de la llamada Revuelta de la España Vaciada. Jaén Merece Más se ha alineado con el PSOE en el Ayuntamiento de Jaén, aunque en otros tres municipios de la provincia mantiene acuerdos de gobernabilidad con el PP.
Camacho señalaba ayer a JM+ como “actor necesario para revertir el histórico déficit inversor en la provincia” y añadía que “se pone de manifiesto la necesidad de la existencia de un partido como Jaén Merece Más para poder revertir esta situación y poner fin a la gran brecha entre territorios”. Y es que JM+ reclama inversiones para que esta provincia pueda converger con las ratios de los demás territorios andaluces y españoles. También recuerdan que Jaén es la provincia andaluza más afectada por la despoblación, con una pérdida de casi 50.000 habitantes en la última década y una sangría aún en las proyecciones demográficas para las próximas décadas.
No es casual que las inversiones anunciadas por el Gobierno de la nación tengan como destinatario al ferrocarril, la principal rémora en las comunicaciones de la provincia, como admitía el presidente de la Diputación. Para conectar Jaén con la alta velocidad se ha elegido una de las cinco opciones que había sobre la mesa: la conexión a través de la línea del AVE Madrid-Sevilla mediante un baipás con el corredor Córdoba-Jaén a la altura de Montoro (Córdoba). “Esta opción es la mejor, ya que es la que permite reducir más los tiempos de viaje y es la más real y rápida de acometer”, indicó el ministro Óscar Puente.
Gracias a este baipás, los servicios con dirección Jaén no tendrán que entrar en Córdoba ni hacer transbordo, de forma que los tiempos de viaje con Madrid se podrán reducir en torno a una hora, conectando Madrid y Jaén en tres horas. Además, el Gobierno ya ha aprobado licitar por 130 millones un contrato para renovar la línea convencional a su paso por las provincias de Jaén y Córdoba, que contempla actuaciones como la mejora de los sistemas de señalización y seguridad en la línea Madrid-Alcázar de San Juan-Cádiz, que forman parte de los corredores Atlántico y Mediterráneo que acogerán circulaciones de Autopista Ferroviaria y de proximidad.
Otra actuación muy esperada en Jaén es la estación intermodal de transportes, donde el Gobierno ha anunciado una inversión de 50 millones en un proyecto que albergará las estaciones de bus y de tren y que integrará el ferrocarril en la ciudad. De esta manera se renuncia al soterramiento de las vías, que fue la opción presentada en marzo de 2011 por el entonces ministro de Fomento, José Blanco. Han tenido que pasar 14 años para que en Jaén se vuelva a hablar de la estación intermodal, aunque ahora, como antes, los jiennenses no piden anuncios, sino plazos de ejecución.